MORDIENDO LA MANZANA

Perdóname mi amor
por éstos sueños húmedos
que gritan tu nombre
y arrancan suspiros
en mis sangre.
Porque estrujo
entre mis muslos
por las noches tu almohada
y me provoca sentir
que tus labios construyen
sus nidos en ellos.
Porque te imagino
mordiendo la manzana
de mi edén.

Perdóname mi amor
porque en desequilibrios
que me causa
la loca de la luna
te deseo yunta y arado
abriendo surcos
en mis tierras.
Para venirme a sembrar…
porque estoy deseando
ser la esclava
de tus fantasías.


Dora Elia.
27 de Enero 2014.
EEUU.

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